Posiblemente muchos de vosotros me vais a odiar, sobre todo las lectoras por lo que voy a escribir a continuación; pero es que me encanta celebrar cumpleaños, me encanta cumplir años, este año en concreto han sido 51, y digo esto por una cosa muy simple: quiere decir que estoy vivo.
Y estar vivo para mi significa poder hacer cosas, cambiar las que no me gustan, cabrearme con los idiotas, disfrutar de mis amigos, querer a la gente que quiero, odiar a los que odio, que hay algunos, en definitiva vivir.
Cuando veo que algunas personas se deprimen al llegar los cumpleaños y se quitan años no lo entiendo, creo que se están negando el derecho a vivir, están echando a perder multitud de oportunidades, y sobre todo de ilusiones.
La semana pasada mi fisio, o mejor dicho mi ex fisio, me recriminó que jugara un partido de fútbol sin haberme recuperado al cien por cien de mi lesión, bueno me parece bien, pero al final ¿porque tuvo que decirme lo que mucha gente me repite a diario?: “Domingo, que ya estás muy mayor para el fútbol, Domingo que ya no tiene años…”, por favor si estáis leyendo esto entenderlo bien: “iros a freír espárragos”, “sois unos tristes” y habéis permitido que la educación clásica y una operación matemática que resta a la fecha en que vivimos actualmente la fecha en que nacimos, da un resultado tan solo llamado edad.
Esa edad es un número ¡nuestra actitud mental es la verdadera edad!, es el verdadero motor que no mueve, que nos hace producir cosas, vivir sensaciones, y eso debe estar en plena ebullición hasta el último de nuestros días.
Hace poco algunas personas me preguntaban que si me iba a jubilar a los 60 o a los 65, para ver que cuota de autónomo debía pagar en base al dinero que iba a recibir, y la verdad es que no comprendí ese paradigma que por cierto, acapara la mente de mucha gente. ¡Insólito ¡ En vez de pensar en que hacer ahora pensamos en que vamos a hacer cuando nos jubilemos y dejemos de trabajar.
Yo me sentí mal, porque no me gustaría dejar de trabajar nunca, es más es que creo que nadie debería dejar de trabajar, nada más tenemos que ver, desgraciadamente, a nuestros mayores cuando se jubilan, cuanto talento estamos desperdiciando por el resultado de una maldita resta.
Pero es que seguimos pensando que trabajamos o vivimos felices, y no nos damos cuenta que trabajando también se puede ser feliz, y se puede compaginar tu vida con la de tu pareja, la de tus hijos, solamente necesitas querer tú mismo.
El caso es que unos días después estaba hablando con mi amigo Raúl para un tema que queremos hacer y salió esta conversación, nos estuvimos riendo un rato porque no nos salían las cuentas ya que lo que queremos hacer nos va a llevar unos veinte años, de manera que la jubilación decidimos que la teníamos que retrasar hasta los setenta.
Pero a la mañana siguiente Raúl vino muy serio y me habló de su amigo Charles Brewer-Carias, con el cual aparece fotografiado al principio de este Post.
Le conoció en la selva de Canaima donde Charles trabaja acompañando y dirigiendo grupos por la selva. Le comenté que me gustaría conocerle pero parece ser difícil porque se está preparando para subir al Everest, otra vez, y está muy ocupado con su entrenamiento.
Bueno la historia no tendría nada raro de no ser porque Charles Brewer-Carias tiene….75 años.; y claro nuestros planes se fueron al traste, ya que nos parece un poco vergonzoso que nos planteemos jubilarnos a los 70 cuando hay hombres como este por el mundo, de manera que decidimos ampliar nuestro proyecto al menos 5 años más.
Y es que como dice la regla de hoy, la forma de vivir la vida es lo que importa, pensarlo amigos.
Regla nº114 “Edad no son los años que se tiene, es la forma de vividlos.”.
Felicidades compi!!! uno mas del club de los que practica Actitud Mental!!…
me debes unos sugus 🙂
un fuerte abrazo
Felicidades!!!! (jajaja Acuario tenías que ser….)
un abrazo
Gran post!