Agosto es un mes complicado. Comprendo que la gente tiene derecho a vacaciones, aunque yo ya hace muchos años que no sé lo que es eso. España se ha parado. Es increíble lo que cuesta realizar cualquier gestión en época estival. Estampida generalizada.
Nosotros, -como somos muy originales-, empezamos el 1 de agosto a promocionar nuestro libro. El Proceso Social se materializa. Acabamos de cumplir un año desde que Domingo Gaitero acuñara el término, y lo cierto es que hoy ya somos muchos los integrantes, lectores y simpatizantes del Proceso Social. Creo que hemos conectado muy bien, tanto con los profesionales de TI, como con todos aquellos que comparten la necesidad de trabajar por y para las personas.
La mejor fuente de conocimiento es comunicar con personas cualificadas en cada una de las áreas de TI. No sólo pueden aportar su experiencia, sino que suelen abrir nuevos senderos y establecer metas que nunca nos habíamos planteado previamente. Tener amigos es un don, y tener amigos instruidos un privilegio. Fomenten las relaciones sociales en su trabajo; nunca se sabe quién puede hacerte la aportación más importante de tu carrera. La suficiencia es el enemigo más peligroso de cualquier profesional.
En el Proceso Social creemos que las oportunidades hay que buscarlas. Algunas veces se presentan sin previo aviso pero, por lo general, hemos de salir a su encuentro. Sencillamente, puede bastar con favorecer la situación. Todos hemos dejado correr cientos de oportunidades interesantes; bien por comodidad, bien por no saber identificarlas convenientemente.
Pues bien; el objeto de este post era recordarles que el Proceso Social cumple un año. No tengo intención de alargarme con disertaciones sobre lo maravillosos que somos. Supongo que ya saben que incluso hemos publicado un libro. El tema es que queremos agradeceros vuestra compañía, y que contamos con todos vosotros para seguir adelante muchos años más.
Felices vacaciones (al que se las pueda permitir). No cerramos en agosto. Domingo tiene que seguir con sus episodios y sus relatos veraniegos. No se lo pierdan, o Domingo les perseguirá eternamente.